La Masía y Bodega Würth: un compromiso con la tradición y cultura

La cultura es mucho más que un conjunto de costumbres: es identidad, es memoria y es comunidad. Desde su creación, Würth España no solo ha apostado por la innovación y el crecimiento empresarial, sino también por la integración en el entorno cultural y social donde desarrolla su actividad. Un claro ejemplo de esta visión lo encontramos en sus dos principales espacios emblemáticos: la Masía, en la sede de Palau, y la Bodega Würth, en la sede de Agoncillo.

La Masía: un puente entre historia y modernidad

Ubicada en Palau-Solità i Plegamans (Barcelona), la sede central de Würth España se asienta sobre un antiguo camino de trashumancia. En este histórico recorrido ganadero se encuentra una masía tradicional catalana, cedida por el Ayuntamiento y restaurada por Würth en el año 2000.

Hoy en día, esta masía funciona como un espacio polivalente donde se celebran eventos especiales, reuniones y exposiciones de arte. Su rehabilitación no solo recuperó una parte importante del patrimonio local, sino que también convirtió el edificio en un símbolo vivo de la arquitectura rural catalana. La Masía refleja el respeto por la historia agrícola y ganadera de la región, integrando ese legado en la identidad corporativa de la compañía.

La Masía, antes de su reconstrucción
La Masía, en su estado actual

La Bodega Würth: un homenaje a la tradición vitivinícola

En 2006, Würth amplió su compromiso cultural con la inauguración de su propia bodega. Dividida en dos espacios, la bodega combina funcionalidad con historia.

El nivel inferior alberga el calado, a más de 11 metros de profundidad, construido con piedras recuperadas de una iglesia derruida de un pueblo cercano. Este espacio ofrece las condiciones ideales para conservar las más de 3.000 botellas que forman parte de la colección de vinos de Würth.

En la parte superior se encuentra el comedor, un amplio espacio de más de 80 m² con capacidad para 45 personas. Utilizado para encuentros con proveedores, clientes y equipos internos, este espacio refleja la filosofía de Würth de crear vínculos duraderos y fortalecer relaciones en un entorno que honra la tradición local.

Exterior de la Bodega Würth
Calado de la Bodega Würth
Comedor de la Bodega

La integración de Würth en el entorno no es solo arquitectónica o estética: es un compromiso real con la cultura, la historia y la comunidad local. En una región como La Rioja, donde el vino forma parte esencial de la identidad, la Bodega Würth representa una forma de mimetizarse con el paisaje cultural. Lo mismo sucede con la Masía en Cataluña, que conecta con las raíces rurales y la memoria colectiva del territorio.

En el siguiente vídeo, Dani Guisado, director de Informática, y Pedro Montenegro, director de Logística, Master Service y Obras nos cuentan con más detalle estas dos ubicaciones únicas en Würth: